El 36% de los recintos no ha pasado por la prueba; entre ellos, centros importantes, como el Hospital Clínico de la U. de Chile y recintos d...
El 36% de los recintos no ha pasado por la prueba; entre ellos, centros importantes, como el Hospital Clínico de la U. de Chile y recintos de las Fuerzas Armadas, aunque ya todos tienen fecha para hacerlo.
Desde julio, los centros de salud de alta complejidad que tratan patologías AUGE deben acreditar ante la Superintendencia de Salud sus procesos clínicos para atenderlas. Eso significa que, en total, hay 147 prestadores elegibles para pasar la certificación, que chequea detalles como la utilización de barandas en las camas o la firma de un consentimiento de los pacientes antes de cualquier procedimiento de riesgo.
De ellos, el 63% cumple con la normativa, mientras el 36% aún está pendiente. Es decir, a la fecha hay 91 centros acreditados: 51 hospitales y 40 privados.
Además, hay 32 recintos exceptuados de conseguir la acreditación, dentro de los que se cuenta la Clínica Ensenada, sobre la cual la semana pasada recayó una acusación de que Fonasa la favorecería en las compras, y que tiene previsto presentarse el 19 de octubre. Otros 26 recintos están en proceso y hay ocho no acreditados.
Entre los pendientes existen importantes prestadores privados, como el Hospital Clínico de la U. de Chile, que está en proceso. Domingo Castillo, director médico del establecimiento, dice que "además de las buenas prácticas que trae consigo y el beneficio a los pacientes, la acreditación es sumamente importante por la actividad AUGE que realizamos, y sería una pérdida tener que dejar de hacerla", lo que ocurriría si no se acreditan.
También se cuentan ocho recintos de las Fuerzas Armadas. Uno de ellos está acreditado (Hospital Militar del Norte), y otro exceptuado (Hospital Naval de Viña del Mar). El resto no está acreditado, pues no tiene la obligación de hacerlo, ya que la población beneficiaria de Capredena no posee acceso al AUGE.
Ser elegible para atender las enfermedades más complejas del plan AUGE se vuelve, entonces, el principal incentivo para el sector privado y de las FF.AA. Eso lo han visto como oportunidad en el Hospital de la Dirección de Previsión de Carabineros (Dipreca). Gabriel Burgos, director transitorio y provisional del hospital, dice que la meta es lograr la acreditación en 2017 y asegura que "nos gustaría ser prestadores AUGE". Actualmente, dice, "los pacientes Fonasa que atendemos son cerca del 3%, pero nos gustaría en el futuro ampliar ese porcentaje, poder presentarnos a las licitaciones".
Desde el Ejército, en tanto, aseguraron que el objetivo es que todos sus recintos (incluido el Hospital Militar de Santiago, hoy no acreditado) estén certificados al 2018. Para ello, se buscará "gestionar todos los procesos de la organización, sean estos clínico-asistenciales y/o administrativos". Añaden que se adoptó "la normativa del Minsal como modelo a seguir de buenas prácticas, a través de los estándares nacionales para la acreditación de establecimientos de atención abierta y cerrada".
En la Armada, en tanto, plantearon que se prepara la acreditación de sus recintos: "Nuestro compromiso (es) garantizar los mismos estándares de calidad y seguridad que se exigen a los prestadores institucionales de salud en nuestro país, lo que comprometemos en nuestra política de calidad asistencial".
La Superintendencia de Salud es la encargada de entregar las certificaciones. El superintendente Sebastián Pavlovic cree que el sistema ha sentado un canon para todo el sector. "Hemos logrado la implementación y consolidación del modelo. Si bien tiene muchos desafíos por delante, la raya para la suma es que el estándar de calidad con que se evalúa es el mismo en lo público que lo privado", explica.
Investigación
La Cámara de Diputados aprobó ayer la creación de una comisión investigadora sobre las compras del sector público al privado, originada a partir de la denuncia sobre Clínica Ensenada. La instancia tendrá una duración de 120 días.
